jueves, marzo 27, 2008

Así que a tus alumnos no les gustó la lectura

Ponte, entonces, una banderita de HELP antes que comiences a elaborar un consabido concepto.

Y recuerda: la lectura es específica.

El autor vive en una residencial determinada de Managua. (Está la posibilidad de armar una manifestación de protesta frente a su casa.)

Pero, entretanto, hay que hacer algo con el texto. Al menos, en los márgenes del texto.

Entre otras cosas, tienes que aprender a apreciar el rechazo.

Te dice llanamente el alumno: esto no añade nada. Por qué esto no añade nada?

No vayas a justificar las bondades del texto. Es lo que hacen los fanáticos en su etapa iluminada: decir que este texto es la Biblia. Recuerda: la educación es secular.

Aunque esté de moda: no te eches la culpa. El autor vive en una residencial determinada de Managua, etc.

Aprende a apreciar el rechazo: si esto no añade nada es porque:

1. El efecto de aprendizaje ha dejado al texto (a este texto específico) atrás. Felicidades.

(Puedes pensar lo contrario también: este alumno no ha llegado a este texto. O peor: no lo he conducido bien hasta esta lectura. Pero entonces ¿actuarás en consecuencia?)

2. El rechazo es el índice (alto) de comunicación entre el instructor y el alumno. Felicidades.

(Pero puedes pensar justamente lo contrario: la baja demarcación comunicativa con que el alumno ha ido al texto.)

Ponte, entonces, una banderita de HELP antes que comiences a elaborar un consabido concepto.





1 comentario:

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.