lunes, marzo 30, 2009

Ante la fractura

La articulación nacionalista letrada como una red de a/filiación (Said) y de creatividad.

Padres e hijos / hijas en una constante labor de creación (y coerción).

Paso subjetivo de la familia y la región a la nacionalidad (literaria).

Ritos de pasaje y redes sociales e intelectuales activas que reproducen estructuras de poder (patriarcal).

Naufragios.

Pero la reproducción es inconsciente.

Y vos (sí, vos) estás en la madeja.

miércoles, marzo 18, 2009

La perversión de la maniobra

"Perry Anderson on Italy´s Squandered Heritage" (el artículo se llama "An Invertebrate Left" (Una izquierda invertebrada), con inusitada alusión a Ortega y Gasset). Pero el centro del argumento es, más bien, Gramsci. El Gramsci (y el Partido Comunista Italiano con él) de la hegemonía, trágicamente erosionado por la "guerra de posiciones" y con pocas oportunidades subjetivas y culturales de acceder a la "guerra de movimiento" (o maniobra). Un PCI que condicionado por el peso de la cultura (el peso de la inteligentsia y la fe en la necesidad de la hegemonía) se niega las oportunidades de golpear al enemigo. Concretamente, los comunistas (dirigidos por Togliatti), al concluir la segunda guerra mundial, no se atrevieron a encabezar una purga estatal de los cuadros fascistas. El resultado reciente se llama, por supuesto, Berlusconi.

Por ironía, la calidad de los intelectuales italianos (de Moretti (y en serio Moretti es de los críticos literarios que hay que leer) a Agamben) resulta ser de los saldos positivos de la cuestión. Pasando, como hace pasar Anderson al lector de manera muy sugerente, por los debates de cinco décadas de la izquierda italiana, y esa tensión inacabable entre el deseo de la hegemonía, el rechazo de la maniobra (casi, se diría, la perversión de la maniobra), el estalinismo que no se pelea con Gramsci (ni con Croce o Dante), y los ultraizquierdismos.

En un país en donde la izquierda de todo tamaño y seña ha jurado portarse bien (unos ante la Iglesia, otros ante los Estados Unidos, casi todos frente al capital), esta lectura es más que sugerente.

jueves, marzo 05, 2009

¿Cómo es la vida intelectual en Nicaragua?

1. La pobreza comanda. El neoliberalismo ha desestructurado los centros significativos: la universidad, la educación, los gremios, los centros culturales, etcétera.

2. Hay mucha fragmentación. No todos los intelectuales se sienten representados por los notables. Pero los notables hablan por todos.

3. Los intelectuales reciben muchos No: todo se hace por proyecto pero hay que hablarle a las ONGs y demás organismos en su propia lengua (más o menos "radical"). Eso implica no pocas veces una posición neocolonial.

4. Por supuesto, sólo algunos No alcanzan el estrellato. (Véase, por ejemplo, la carta, firmada por muchos intelectuales, apoyando a Sergio Ramírez por el caso de un prólogo vetado. Más recientemente se habla del "martirio interior" de Cardenal.)

5. No hay un apoyo signficativo del Estado a los proyectos culturales (entendidos en el sentido estricto de bellas artes, o más amplio de estudio de las identidades).

6. A la empresa privada, porque es excéntrica y tiene el corazón en otra parte, no le interesa el financiamiento de la educación y la cultura. (Excepto si se trata de mortificar a las audiencias trayendo artistas calzón, como Juanes.).

7. En las Universidades las Humanidades han ido de baja en las últimas décadas (con frecuencia descoyuntándose o haciendose cuechitos). El interés son los estudios de negocios, tecnología y derecho.

8. Los intelectuales, por necesidad o ceguedad, tienden a devenir cortesanos del poder (del poder del Estado, del poder de la empresa privada, del poder de los medios de comunicación, del poder de otros intelectuales y notables).

9. Se ha seguido sacralizando la poesía como gran escenario de la identidad, pero no se ha debatido de verdad la identidad.

10. No hay un debate sobre estos puntos que no se lo trague la Personalidad.


(Ya antes había acometido estos puntos en otra parte. Sobre la baja de las Humanidades, también.)

miércoles, marzo 04, 2009

De la situación educativa en Nicaragua

Los niños del tercer grado, turno vespertino.

Un asunto central de su vida escolar (para algunos de ellos y sus padres el central) es el plato de comida que oferta la escuela.

Gallo pinto, queso o crema.

Para eso los niños llevan platos de plástico todos los días.

La hora de la comida atrasa un poco el desarrolo de las lecciones. Pero, ni modo, es un punto importante. Y en esto todos coincidimos con la maestra.

Hoy no hubo comida porque la madre encargada olvidó cocinar, o quizá birló los granos.

El maíz, por otra parte, está carísimo en Mesoamérica. (A veces la dieta incluye tortillas.)

Algún niño de esos va a volver a pie hasta la zona en donde vive, y esta vez sin haber comido.