Ordeno la biblioteca, siento la desfamiliarización, lo Unheimlich,
los autores muertos que se escuchan con los ojos,
la pesantez e inutilidad de lo material, la metáfora
que alude a página y excremento, la bazofia publicada,
la meditación sobre para qué tanto libro,
un deseo casi casto por lo virtual
(el espacio que ahorraría con una biblioteca de puros PDFs),
la culpa por el tiempo que se acumula en una biblioteca,
y el autor menor
(¡yo mismo!)
que queda atrapado entre dos autores canónicos,
el
Pajarito entre las dos Bestias
feb/2021