y había unos muchachos delirando por Bolaño
que aunque no aparecía en ninguna parte de su obra el Subcomandante Marcos mencionado, secretamente lo apoyaba como parecía obvio
que aunque nunca hablaba del rapto creador que era la locura (o era al revés?) no cabía duda que era el rapto creador y nada más (además de la locura) lo que lo arrebataba
que aunque nunca dijo que él era Borges, además de Borges y yo, que sin duda lo era porque qué duda cabía que en ese gesto de morirse lo era?
que aunque por los datos concretos parecía uno de esos autores escasos que no tienen oído musical, en realidad lo tenía como puede constatarse en su sonrisa irónica (tan musical)
que qué decir de su erotismo filtrado y su silla fotografiada
y que, por supuesto, horresco referens Isabel Allende aullaba